Estaba en
la cúspide cuando tome cada decisión, lleno de fervor y deseo por algo mejor,
siempre abría cada puerta sin preocupación, sin que me importaran las
consecuencias; ahora entiendo, porque uno debe caminar con cautela y no poner
en riesgo, lo que ahora tanto se anhela.
Yo sé que
para mí ahora es tarde, cada día vi cómo te alejabas y me dejabas, te escurrías
como agua entre mis dedos, sin importar cuan fuerte cerrara la mano, al abrirla
siempre estaba vacía.
No comments:
Post a Comment